Las grandes infraestructuras que dispone hoy en día Catalunya (ferrocarril,
electricidad, agua y gas principalmente), nacieron en el siglo 19 de la
mano de la iniciativa privada. Todas ellas pasaron por un proceso de concepción,
difusión, financiación, internacionalización, etc.
hasta que consiguieron arrancar para llegar a ser lo que hoy en día
conocemos y utilizamos.
La nueva gran infraestructura que precisa Catalunya en el recién
siglo 21 es la banda ancha. El término “banda ancha”
proviene de la terminología utilizada en telecomunicaciones, e
indica aquel canal de comunicaciones que dispone de un ancho de banda
suficiente que permite el envío y recepción de video, imágenes,
voz y datos a altas velocidades. A partir de aquí, en los años
90 se empieza a utilizar el término “banda ancha” para
representar un nuevo concepto (al igual que el coche, la radio, la televisión,
la telefonía, el móvil, internet, etc.) de alcance mundial
y que simboliza tanto las nuevas infraestructura de fibra óptica
o de radio que disponen de esa capacidad y conectan las viviendas y empresas
como los nuevos servicios de comunicación, ocio, educación,
sanidad, seguridad, comercio, etc, que se transmiten por esas redes a
las viviendas y empresas. Desde finales de los 90, se empieza a desarrollar
la banda ancha de forma masiva en los tres continentes.
A continuación resumimos la historia de esas infraestructuras existentes
y que nacieron en el siglo 19:
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